La manera en la que nos alimentamos tiene una gran influencia sobre nuestra salud y sobre el medio ambiente. El derecho a una alimentación sostenible y saludable debe ser un derecho fundamental para todas las personas. Zaragoza ha sido una ciudad históricamente ligada a su huerta, con un potencial elevado para alimentar a sus habitantes con verduras y hortalizas.
Con fecha 8 de mayo de 2019, el
Ayuntamiento de Zaragoza aprobó la
Estrategia de Alimentación Sostenible y Saludable de Zaragoza (EASS) con
un marco temporal 2030 y en línea
con lo establecido en el Pacto
de Milán sobre políticas alimentarias urbanas. Esta estrategia orienta las políticas alimentarias
municipales e incluye objetivos, conceptos clave, medidas y acciones concretas,
así como una propuesta de gobernanza alimentaria para la ciudad de Zaragoza. Es
el marco de referencia del Ayuntamiento de Zaragoza para avanzar hacia
un sistema alimentario más sostenible y saludable para la ciudad.
La EASS va dirigida a mejorar no sólo la salud individual
sino también la salud colectiva, puesto que una alimentación inadecuada es uno
de los factores que está detrás del aumento de enfermedades crónicas.
Esta estrategia está estructurada en 6 ámbitos de actuación
con un total de 21 medidas y 99 acciones:
En
estos momentos, el Ayuntamiento de Zaragoza junto a las entidades CERAI y Mensa
Cívica y el apoyo económico de la Fundación
Daniel y Nina Carasso, están
desarrollando el proyecto “De la teoría a la
acción: primeros pasos para el desarrollo de la Estrategia de Alimentación
Sostenible y Saludable de Zaragoza”. Una vez elaborada la
Estrategia, resulta necesario definir planes de acción que concreten las
actuaciones a desarrollar en un marco temporal de 3 años. El proyecto pretende
hacerlo a través de distintas acciones de gobernanza. Para ello se acaba de
constituir el Consejo Alimentario
Municipal de Zaragoza (CALMZ), órgano de participación integrado por 110
entidades sociales y económicas relacionadas con el sistema alimentario local.
Además, se está realizando un trabajo transversal de coordinación entre todas
las áreas municipales relacionadas con las políticas alimentarias.
¿Qué
es la Alimentación
Sostenible y Saludable?
La
alimentación saludable es aquella
que aporta los nutrientes esenciales y la energía necesaria, en las cantidades
adecuadas y suficientes, para cubrir las necesidades nutricionales de cada
individuo y prevenir enfermedades no transmisibles (como la diabetes, las
cardiopatías, los accidentes cerebro-vasculares y el cáncer) así como la
malnutrición en todas sus formas y los trastornos alimentarios.
Según la OMS, los principios de la
alimentación saludable se basan en:
• Una
lactancia materna adecuada.
• Ejercicio
físico a lo largo de toda la vida.
• Una
ingesta calórica proporcional al gasto calórico
• Un
aumento del consumo de frutas y verduras de temporada, frescas y cocinadas,
legumbres, cereales integrales y frutos secos.
• Reducción
de la ingesta calórica procedente de las grasas, cambiando las saturadas por
las insaturadas y eliminando los ácidos grasos trans, sobre todo las grasas
trans producidas industrialmente.
• Reducción
de la ingesta de azúcares libres.
• Reducción
del consumo de sal.
La alimentación sostenible
es aquella que:
- Utiliza eficientemente los recursos y reduce el impacto ambiental a lo largo de toda la cadena alimentaria.
- Contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero causantes de la crisis climática.
- Optimiza la utilización de agua, energía, agroquímicos de síntesis, etc.
- Evita la degradación de los recursos hídricos y su sobreexplotación.
- Favorece la conservación de los ecosistemas, la biodiversidad y el suelo fértil, de los que dependemos totalmente para vivir en nuestro planeta.
- Reduce la generación de residuos y desperdicios
- Contribuye a la soberanía alimentaria y nutricional de las generaciones presentes y futuras.
- Apoya la economía local, la seguridad alimentaria y el acceso a la alimentación a los más vulnerables.
La alimentación sostenible permite avanzar
hacia sociedades equitativas y respetuosas con el medio ambiente.
¿Qué podemos hacer individualmente?
- Consumir más frutas y verduras, de temporada, de proximidad y ecológicas.
- Moderar el consumo de carnes y otros alimentos de origen animal, priorizando aquellos de ganadería extensiva ecológica y pesca saludable.
- Sustituir la proteína animal por proteína vegetal, especialmente consumiendo legumbres.
- Interesarnos por quién produce lo que compramos y cómo lo produce. Rehumanizar nuestra alimentación.
- Comer de forma equilibrada y con moderación. Reducir el tamaño de las porciones.
- Recuperar la cultura alimentaria, dando valor a los alimentos, las variedades locales y las recetas tradicionales.
- Cocinar y comer disfrutando de la comida. Comprar directamente a los productores/as, en mercados locales o en cooperativas, asociaciones y en tiendas y mercados de barrio.
- Disminuir radicalmente el azúcar, las grasas saturadas, la sal y los ultraprocesados.
- Planificar nuestros menús, comprando solo lo que necesitemos. Evitar compras compulsivas que prioricen alimentos menos saludables y sostenibles.
- Evitar el despilfarro alimentario y fomentar la compra a granel, minimizando el uso de envases y priorizando aquellos compostables.
Puedes consultar y descargar el documento completo y el
folleto en la siguiente dirección