Prevención de los efectos del exceso de temperaturas

Un año más en Aragón, desde la Dirección General de Salud Pública, se pone en funcionamiento el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperaturassobre la Salud del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. El desarrollo de este Plan tiene como principal objetivo la prevención de daños a la salud provocados por el exceso de calorUn aspecto esencial de este Plan es la implicación de los Servicios Sociales, ya que son las personas mayores especialmente las más desprotegidas, las más vulnerables.Otro elemento primordial es la información a los ciudadanos, a los grupos de más riesgo y a los profesionales sanitarios. 

Con el desarrollo de este Plan, se establece un sistema de información que permite la vigilancia activa de los riesgos asociados a la exposición a temperaturas excesivas. Se recoge información predictiva sobre temperatura ambiental, información sobre las variaciones de la demanda asistencial en urgencias e información diaria sobre los cambios cuantitativos de la mortalidad. Se puede consultar el informe de los efectos de las altas temperaturas de 2012.

¿Quiénes son los más afectados?
Desde un enfoque sanitario, la exposición a temperaturas excesivas afecta especialmente a personas mayores y niños pequeños, personas con enfermedades crónicas y con discapacidades que limitan su autonomía, obesidad excesiva, ciertos tratamientos médicos, consumo de alcohol y otras drogas, en las que los mecanismos normales de termorregulación pueden verse descompensados. Asimismo, la exposición excesiva al calor por razones laborales (trabajo manual en el exterior), deportivas o de ocio son importantes factores de riesgo.
Desde un punto de vista social, personas que viven solas, la marginación, la dependencia, la discapacidad, las condiciones de habitabilidad de las personas con menos recursos, añaden factores de riesgo que hacen aún más vulnerables a colectivos que, precisamente por sus condiciones socioeconómicas, deberían estar más apoyados.

¿Cómo podemos prevenir?
Durante el día, mantener las ventanas y persianas cerradas para proteger la vivienda del  calor y aprovechar para ventilar la casa por la noche, cuando las temperaturas han descendido. Beber agua sin esperar a tener sed. Si se está tomando de forma crónica alguna medicación, consultar con el médico; usar ropa apropiada: ligera, no apretada, de colores claros y preferentemente de algodón, evitando la ropa sintética, utilizar gorra para protegerse del sol, y protección para los rayos solares.  
No es recomendable realizar actividades que exijan esfuerzo físico importante cuando está haciendo mucho calor. No dejar a niños, ancianos o animales en coches con las ventanas cerradas. Mas información sobre medidas preventivas en el folleto descargable.

¿Qué hacer ante la aparición de efectos sobre la salud?
El calor excesivo puede alterar nuestras funciones vitales. Una temperatura muy elevada produce pérdida de agua y electrolitos que son necesarios para el normal funcionamiento de los distintos órganos. Ante los primeros síntomas, calambres, irritación de la piel o quemaduras, agotamiento y temperatura elevada: buscar refugio en la sombra o en un lugar con aire acondicionado; tomar una bebida no alcohólica fresca, descansar, tomar una ducha con agua fresca y ponerse ropa ligera.
Si aparecen síntomas de gravedad como son: temperatura muy elevada, dolor de cabeza, vómitos y pérdida de consciencia: Tratar de conseguir asistencia médica lo antes posible por los procedimientos habituales (acudir a un servicio de urgencias, o llamar a los teléfonos de emergencia 061 y 112).